A las barricadas…

Este eslogan es de los pocos que, tal como se dice hoy en dí­a, invita más a la fiesta que a la lucha y suena más a ataque que a defensa. A mi hay veces que, cuando leo, veo o escucho algo, me viene a la cabeza sin poder evitarlo. No tengo claro si quiero esconderme o que me vean apilando enseres y carromatos. No estoy seguro si quiero evitar que me invadan o preparar el parapeto que me sirva de base para el asalto. Me explico.

Cuando con el hipotecazo que nos está cayendo, la inflacción, el precio del petróleo, el efecto 66% euro, etc etc etc va uno y lee que la banca española (creo que aquí­ incluyen también a la vasca), en los primeros 9 meses del año ha pillado 14.440 millones de euros en beneficios, desde el rinconcito nostálgicamente revolucionario de mi cerebro arranca como un grito incallable… A las barricadas!!!. Porque si, lo hemos leido bien, son, en pesetas, más de 34 millones de millones, 34 billones a costa de nuestros dineros o de su ausencia. Un 20% más que el año pasado. ¡Viva la justicia social! Todos asfixiados y los que nos asfixian forrándose a costa nuestra. Eso sí­, luego nos ponemos a discutir sobre el impuesto de sociedades, lease, el que grava precisamente los beneficios empresariales, y lo mismo da un punto que tres, como si hablásemos del alavés. Pero es que en este caso, por ejemplo, el punto sale a 144 millones de euros, o lo que era lo mismo, 346mil millones de pesetas.

Y me dirán que eso es simplificar. Y me acusarán de demagogo. Y yo, en vez de levantar las barricadas y asaltar los templos del dinero,  pagaré mi parte alicuota en comisiones, intereses y descubiertos. Pero me quedará, como al de cierta campaña de cierta cadena comercial el desahogo de recurrir a otro eslogan… Yo no soy tonto. Pago pero no soy tonto.