Aquello que fue jornada de lucha, de reivindicación y homenaje se ha convertido a fecha de hoy en jornada de fiesta. Con la misma ilusión con la que aquellos luchadores de antaño preparaban y esperaban este día para demostrar su fuerza, los nuevos trabajadores, y trabajadoras claro, planifican hoy con meses su destino vacacional. Equiparan un día como hoy con otros como mañana, con sábados, domingos, moscosos y horas extras acumuladas. Huyen gastando.
En sitios como Madrid lo mismo da el martirio de los trabajadores que el de los patriotas. En otros vamos del santo patrón a la dura lucha sindical. Lo mismo da que da lo mismo. Son días para huir, días para descansar (?). Al final todos a reivindicar nuestra clase en Benidorm, en Nueva York o ya en plan moderno y de responsabilidad ambiental, en un agroturismo.
Días como hoy sólo trabajan los sindicalistas, y hasta estos seguro que hacen turnos para poder irse de puente. Bueno, los sindicalistas y otros espabilados que resulta que van a terminar con el capitalismo internacional y a lograr la destrucción del estado y la colectivización de los medios de producción, y hasta el paraiso comunista poniendo tres o cuatro bombas en los centros neurálgicos de la economía global y de la explotación capitalista, en Donosti y Amorebieta. Eso si, digo yo que la bomba que han puesto en Osalan habrá sido puesta por personal cualificado, debidamente adiestrado y siguiendo los oportunos protocolos de prevención de riesgos y seguridad laboral. Bueno, pues hasta estos, han puesto las bombas de víspera para poder irse de puente.
En fin, que a mi esta fecha cada vez me parece sinceramente más prescindible dentro del calendario festivo. Esto es un día de lucha. Y en este sentido, la fiesta para el que se la trabaja, y el que quiera fiestas que se moje el culo. Mientras sigamos un día si y otro también afirmando que ya no tiene sentido la izquierda, que todos son iguales, y que todo está como está y que nada puede cambiarse ya, el 1 de mayo irá, poco a poco pareciéndose cada más a aquellos primeros de mayo no tan lejanos y de tan infausto recuerdo. Aunque bueno, bien pensado, para algunos igual no es tan infausto…
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