Publicado en Diario de Noticias de ílava el 23 de diciembre de 2007Â
Nola aldatzen diren gauzak! que decían hace años los chicos de Gari. En la provincia del futbol y el montañismo, y la pelota mano, y lo de recoger setas triunfan ahora por demás los deportes del hoyo. Hoyo suspendido y convertido en aro u hoyo enterrado y bien regado. en definitiva, se trata de hacer pasar la bola por el aro. Y por el aro parecen empeñados algunos oscuros intereses en hacer pasar a sendos ayuntamientos para aumentar su oferta deportiva.
¿He dicho deportiva? Pues no se por qué me da que ahí viene precisamente el problema. Porque me da la impresión de que no hay tanta afición como parece a lo de los hoyos enterrados. De hecho tengo la impresión de que algunos campos públicos y cercanos a estos municipios que empiezan por La no están precisamente saturados. Otra cosa es que según parece, el practicante de golf es más bien vago, y prefiere tener el campo junto a su casa.
¿Junto a su casa he dicho? Pues como decía antes me da la impresión de que otra vez, ahí vien el problema. Vamos, que el golf en definitiva no le importa a nadie. Lo que importa son los ladrillos. Lo que se busca en edificar y vender, y si al final no se hace el campo, si al final se queda seco porque no hay agua, puede que le importe a uno de los miles de vecinos. Pero me da la impresión que no es lo que quita el sueño a los promotores, maquinadores y sobornistas varios.
Al final igual la derecha era plantearse en serio cuantas casas se van a construir en La Rioja, y dejarse de discutir de hoyos y grines de regadío. Porque por otra parte, en La Rioja, entra Hoyas, dólmenes, bodegas, castillos, vides, sarmientos, sierras y pueblos, no debería quedar mucho tiempo para eso del golf, que en la vida hay cosas más importantes que ver y hacer aparte de forrarse haciendo agujeros sin fondo.
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