Esta polémica de Veleia es, por parte de algunos (entiéndase algunos en el sentido en el que por economía del lenguaje no diríamos algunos y algunas, sino simplemente algunos, tal como hemos dicho), reclacitrante e inoportuna, recurrentemente inoportuna, añadiría yo.
De aquí a unas horas se inaugurará el museo de arqueología, (uy perdón y el de naipes también). A un servidor le tocará asistir, porque no es de los de rechazar invitaciones, y en mi calidad de secretario de la comisión alavesa de la bascongada, pesa más la institución que mi estado de ánimo. Pesa también el ver como ha quedado la obra en la que han participado tanta gente que importante ha sido en mi vida, empezando por mi señor padre. í‰l no podrá ir, aunque tambien estaba invitado de forma nominal. Entre los fastos y una oportunidad de conocer un yacimiento murciano ha optado por la segunda. Arqueólogo a tus arqueologías que diría el otro (qué bien nos hubiera ido a todos si este principio tan sencillo se hubiese enseñado con más profusión en las universidades y hasta en la vida…).
El caso es que como decía yo iré. Y aprovechando tan insigne acontecimiento haré lo que se tercia hacer y más en evento como este… poner cara de poker (por lo de los naipes) y aguantar el chaparrón. El chaparrón que es para uno ver como se rompió lo que no debía romperse. Como se rompió por quien se empeña en ser más papista que el papa. Ver como se rompió por quien se aprovecha de la ignorancia ajena para sus propios fines. Ver como se rompió porque el más ignorante de los ignorantes acudió como paladín de la verdad indiscutible a defenderla con tal vehemencia que incluso sus instigadores se sintieron abrumados por tamaña contundencia.
Bi Bat. Uno dos. Mucha charla y poco o ningún canapé, supongo yo, porque en situaciones de crisis como la actual, no es lo más propio comer con la que está cayendo, si acaso abrir el paraguas y callar. Espero sinceramente que me guste el museo. Espero ver en los cráneos presentes en las vitrinas la humanidad que echaré de menos fuera de ellas. Espero que no vuelva a oir noticias hasta que no las haya. Espero que alguno se dedique a su labor y entienda que los impuestos no se pagan para inquinas. Espero que algún día, todo pudiese ser como fue, como lo que las vitrinas del museo demuestran no ya que pudo ser, sino que fue.
Nota uno… Por razones de prudencia y demás esto se publicará a hora tal que no interfiera en las caras de poker que tendré que aguantar y poner, así que si la lees antes pasaté como si jugases al mus ;-).
Nota dos… siempre que hablo en masculino lo hablo en castellano antiguo, esto es, de manera tal que las referencias cubren al género humano, bien sea masculino, femenino o neutro.
Nota tres… AÂ ver a quien veo de sobra y a quien echo de falta. La quiniela la tengo bajo notario, me la guardan gentes que me han inspirado el título de estas líneas. Y otra cosa diré para terminar… sea cual sea el final, creo que sé cual fue el principio, o los principios o por mejor decir su ausencia.
estoy ansioso por saber las ausencias que has notado y sobre todo las sobras..je,jeje..en estos días están habiendo demasiadas y los carroñeros y carroñeras de este país se están hartando. Anda!! Carroña, carre…. ummmm que casualidad